Chile como un Hub de Innovación Mundial en Soluciones Antimicrobiales.

Cuando pase esta pandemia todos queremos volver a nuestra vida normal. La pregunta del millón es: ¿Qué va a ser “lo normal” después de esta pandemia?

Podremos volver a viajar libremente por el mundo sin miedo a llegar de vuelta a nuestro país con alguna infección grave? Podremos volver a asistir libremente a eventos deportivos masivos, conciertos, cines, gimnasios, colegios, universidades, supermercados, malls o restaurantes?
Y qué pasa con las personas que profesan una fe y asistir a un templo religioso (cualquiera sea su fe) es parte fundamental de su vida?
Simplemente debemos resignarnos a una “nueva normalidad” de cuarentenas, horarios sumamente restringidos, y nula vida social? O podemos darle la pelea a este virus (y los que vendrán) articulando nuevas estrategias y tecnologías que ya están disponibles y así crear una “nueva normalidad” mucho más segura y funcional para todos?

Y cómo desde Chile podemos aportar en la creación de esta “nueva normalidad” con todo el set de innovaciones endémicas que se están desarrollando rápidamente en nuestro país?

El desafío de la Post-Pandemia

Hablar de “post-pandemia” cuando aún estamos en medio de una pandemia puede sonar como a “demasiado optimista” o incluso como “negacionista”, pero el tema es que ya debemos empezar a pensar seriamente en todos los desafíos con que nos vamos a encontrar en esta “nueva normalidad” en que muchas de las recomendaciones que han hecho organizaciones como la OMS o la CDC de USA van a perdurar en el tiempo como constantes recordatorios de que ya nada volverá a ser como era pervio al 2020.

Por ejemplo las orientaciones del grupo de consultores expertos de la CDC, Covid-19 Recovery Consulting indican que actividades como ir al gimnasio, un restaurant cerrado, o el trabajo en oficinas con escasa ventilación pueden significar riesgos de contagio Medio-Alto, y otras actividades como asistir a bares, discotheques, cines, servicios religiosos, o moverse en transporte público, o viajar en avión se considerarían como situaciones de alto de contagio.

Las preguntas entonces son: ¿Hasta cuándo serían válidas, necesarias u obligatorias todas estas recomendaciones? O será que este nuevo futuro post-pandemia va a incluir todas estas recomendaciones y quizás algunas otras adicionales? ¿Volveremos a tener un mundo de libertades o el futuro se atisba como un lugar llego de restricciones y miedos?

¿Podemos usar nuevas tecnologías para darle la pelea al virus y poder tener una vida más “normal”?
Y en último caso, ¿qué es lo que vamos a considerar “normal” en los próximos meses y años?
Quizás si vemos el vaso medio lleno, ese vaso de las oportunidades y de un futuro un poco más luminoso, nos podríamos hacer otra pregunta relevante:

¿Podemos desde Chile colaborar en darle forma a esta “nueva normalidad” usando todo el know-how que tenemos en soluciones antimicrobiales basadas en Cobre, Micro-Cobre y Nano-Cobre? ¿Y si Chile fuera en el futuro próximo un hub de innovaciones endémicas basadas en las propiedades antimicrobiales del cobre y con un impacto global y multi-industria?

Chile como Hub de Innovaciones Endémicas Antimicrobiales

Chile en los últimos 10 años se ha transformado en un polo de innovación único en el mundo! Se han dado las condiciones endémicas perfectas para el nacimiento de más de 70 empresas que están desarrollando soluciones muy innovadoras basadas en las propiedades antimicrobiales del cobre!

Este es un hito notable que incluso ha sido mencionado en un artículo del World Economic Forum y que también ha sido cubierto por diversos medios internacionales, sobre todo desde el 2020 en que la atención del mundo se puso en las distintas acciones, medidas, tecnologías y soluciones para hacer frente al Covid-19.

Lo interesante de esto es que, si bien en Chile estamos MUY familiarizados con este tema, y prácticamente todos tenemos algo en nuestras casas con cobre, micro-partículas de cobre o nano-partículas de cobre por sus propiedades antimicrobiales (desde calcetines hasta esponjas para lavar platos), resulta que fuera de Chile este es un tema muy desconocido! Y me di cuenta de esto los últimos 3 años que me ha tocado viajar mucho fuera de Chile y me ha tocado hablar con mucha gente en todo el mundo, de las propiedades antimicrobiales del Cobre y siempre recibo el mismo set de preguntas de vuelta: ¿El cobre? ¿Antimicrobial? ¿En serio? ¿Y es efectivo? ¿En serio funciona? ¿Pero cómo mata a las bacterias y virus? ¿Pero es tóxico entonces? ¿Y entonces si es tan bueno y efectivo, por qué no lo usan en todos los hospitales del mundo? ¿Y por qué entonces no se usan en artículos médicos, en contenedores de alimentos o en los aviones y aeropuertos para evitar contagios entre continentes? o en el transporte público? Y lo más espectacular de todo es lo siguiente: Hoy, en medio de la peor pandemia de los últimos 100 años, como país estamos ad-portas de entrar a los mercados internacionales con todo un set de soluciones antimicrobiales para todo tipo de productos, en varias industrias y que se van a demandar literalmente en TODO EL MUNDO.

Nosotros con Copper3D y nuestros materiales para impresión 3D somos solo un ejemplo de las muchas empresas chilenas expertas en soluciones antimicrobiales, innovación que nos ha permitido en pocos años transformarnos en pioneros y líderes del sector de “Impresión 3D Antimicrobial” y generar un impacto mundial en industria, sobre todo ahora con nuestro proyecto “Hack The Pandemic” y las validaciones que hemos logrado de nuestros materiales como agentes Antivirales de efectividad contra el Coronavirus Humano, o nuevas validaciones como registro de nuestra compañía en FDA y EPA (USA).

¡Pero esto no se trata solo de impresión 3D antimicrobial!

En Chile tenemos empresas expertas en soluciones antimicrobiales como textiles, aditivos, implementos de desinfección, celulosa, recubrimientos, láminas, ropa de bebés, ropa de uso veterinario, y un largo etcétera.

Podríamos fácilmente proyectar que próximamente veríamos a nuestro querido cobre como agente antimicrobial muy presente en apósitos y artículos médicos, filtros de aire, pinturas, revestimientos, packaging de alimentos y hasta celulosa para hacer papeles antimicrobiales de uso clínico! Se imaginan el impacto global que tendría todo esto?

El futuro es prometedor para todas estas empresas, conozco personalmente a muchos de sus fundadores y todos están viviendo un período de crecimiento explosivo en ventas y están rápidamente desarrollando nuevas soluciones para los nuevos desafíos que se vienen de cara a lo que queda de esta pandemia y al escenario post-pandemia.

En suma, Chile ha sabido usar sus ventajas competitivas y know-how en cobre para desarrollar un espectacular ecosistema de innovaciones en torno al cobre antimicrobial, un muy buen ejemplo de lo que podríamos acuñar como Innovación Endémica ya que se han dado condiciones únicas en Chile para poder empezar a liderar a nivel mundial la conversación en torno a este tipo de soluciones, ecosistema que en los próximos meses y años dará mucho que hablar y cambiará radicalmente el panorama de lo que exportamos como país, generando además un impacto mundial en el combate contra virus y bacterias multi-resistentes que ya se asumen como parte de los grandes desafíos de la humanidad en los próximos años.
Creo que ahora sí, llegó la hora de pegarse el salto y empezar a exportar Innovación y Know-How en torno al cobre, ojalá toneladas de productos con alto valor agregado y de impacto mundial, que puedan evitar infecciones y salvar vidas a escala global!.